¡Consejos para padres de familia: ¡Mantengan a sus hijos leyendo este verano!
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Cuando los maestros no están ahí para motivar a sus hijos a leer, ¡depende de ustedes! Aquí hay unos cuantos consejos:
- No solo les DIGAN a los niños que es importante leer: ¡DEMUÉSTRENSELO! Dejen que los vean leyendo a ustedes, ya sea un libro, un periódico, una revista, una carta, una receta, un manual de instrucciones, o lo que sea, impreso o en línea. Háblenles a sus hijos sobre lo que están leyendo, así como lo que ellos están leyendo.
- Durante el verano, reserven un tiempo para que la familia lea junta, ya sea en grupo o cada uno con su propio libro. No tiene que ser largo: solo unos cuantos minutos al día.
- No utilicen la lectura como castigo por mal comportamiento, o algo desagradable que sus niños tengan que soportar antes de que se les permita hacer una actividad preferida; esto solo les enseñará que leer es algo que deben evitar, no valorar y disfrutar.
- En el verano, los niños no tienen acceso a libros por medio de la biblioteca escolar, así que asegúrense de que tengan acceso de otras maneras. Pongan libros en un estante donde los niños los puedan alcanzar. Visiten bibliotecas y librerías. Busquen libros en tiendas de segunda mano y ventas de garaje. Intercambien libros con otras familias para que todos tengan algo nuevo que leer.
- La Biblioteca Pública de Austin tiene programas de verano gratuitos y divertidos para niños de todas las edades; ni siquiera tienen que tener una tarjeta de la biblioteca para participar. Pero ¡también deben tener una tarjeta de la biblioteca pública! Les da a ustedes y a sus hijos acceso a miles de libros, además de libros electrónicos y otros recursos digitales, audiolibros, películas y más.
- ¡La lectura digital cuenta! Ayuden a sus hijos a acceder a materiales de lectura gratuitos y de calidad en línea por medio de MackinVIA del AISD y así como la Biblioteca Pública de Austin.
- Fomenten que sus hijos compartan libros con amigos y que los discutan juntos. Ofrezcan una merienda especial para una junta de un "club de lectura" de verano u organicen un grupo de niños para visitar la biblioteca pública juntos.
- ¡La lectura no está solo en los libros! Hablen con sus hijos sobre cómo se utiliza la lectura en la vida diaria: al seguir una receta, revisar el clima en el teléfono, comparar productos en el supermercado, leer direcciones, carteles en la calle o un menú en un restaurante, o cualquier otra cosa.
- Si están viajando en el verano, lean con sus hijos sobre el lugar al que van a ir y para planificar las actividades. Déjenlos que sean los guías turísticos y que les enseñen acerca de algo nuevo que hayan aprendido al leer.